La seguridad y los procedimientos intervencionistas

Preguntas frecuentes acerca de la seguridad en el ámbito de la fluoroscopia intervencionista

» ¿Cuáles son los requisitos que deben cumplirse para que un centro de fluoroscopia sea seguro? 
» ¿En qué procedimientos fluoroscópicos podrían administrarse a los pacientes altas dosis de radiación? 
» ¿En qué regiones anatómicas podrían presentarse lesiones cutáneas como resultado de procedimientos fluoroscópicos? 

» ¿Cuáles son los requisitos que deben cumplirse para que un centro de fluoroscopia sea seguro?

Para garantizar que un centro de fluoroscopia es seguro deben cumplirse los siguientes requisitos:

• el centro de fluoroscopia debe estar registrado ante las autoridades que reglamentan ese tipo de establecimientos;
• el centro debe contar con autorización expedida por la autoridad nacional competente; por lo general, la autorización se otorga tras comprobar que se cumplen los criterios para el tamaño de las instalaciones y sus blindajes, la capacitación del personal y la puesta en marcha de un sistema de control de la calidad que garantice la protección radiológica; 
• los sistemas de fluoroscopia deben ajustarse a la normativa de la Comisión Electrotécnica Internacional (IEC) o a las normas nacionales correspondientes; 
• los sistemas de fluoroscopia deben someterse a pruebas de aceptación efectuadas por físicos médicos cualificados, y no solo deben aceptarse los informes del fabricante;
• deben hacerse comprobaciones periódicas de la seguridad con arreglo a los protocolos definidos por las asociaciones de profesionales o las organizaciones internacionales correspondientes; y
• debe hacerse un seguimiento de las dosis de radiación que reciben los pacientes y el personal y debe asegurarse su conformidad con la normativa aceptada.

» ¿En qué procedimientos fluoroscópicos podrían administrarse a los pacientes altas dosis de radiación?

Al efectuar procedimientos como la reparación intravascular de aneurismas, las angioplastias renales, las angioplastias ilíacas, la colocación de prótesis intravasculares renales, las colangiopancreatografías retrógradas endoscópicas (CPRE) con fines terapéuticos, y la colocación de prótesis y tubos de drenaje en las vías biliares podrían aplicarse dosis elevadas de radiación a los pacientes, incluso tan altas como las de los procedimientos de radiología y cardiología intervencionista y la dosis que recibiría la piel podría superar 1 Gy.

En todos los procedimientos fluoroscópicos que se prolongan podrían aplicarse altas dosis de radiación. Podría ocurrir que muchos de esos procedimientos se efectuaran fuera de los departamentos de radiología. Si el personal no cuenta con la capacitación adecuada y no se adoptan las medidas apropiadas de protección radiológica, las dosis de radiación que se administran a los pacientes y los riesgos conexos podrían ser altos. Ese tipo de procedimientos requieren un nivel más alto de optimización.

» ¿En qué regiones anatómicas podrían presentarse lesiones cutáneas como resultado de procedimientos fluoroscópicos?

Sobre la superficie de la piel, en el punto de entrada del haz de rayos X. La piel recibe la dosis de radiación más alta en el punto de entrada del haz de rayos X, por lo que en esa zona cabe esperar que se produzca una lesión cutánea. Si el haz entra por la superficie posterior del paciente (la espalda), el punto de entrada en la espalda se convierte en la zona susceptible de presentar una lesión secundaria a radiación, en caso de que la dosis administrada a la piel supere el umbral de dosis para que ocurra una lesión cutánea.

Por lo general, en las proyecciones laterales y oblicuas se utilizan intensidades de radiación dos a tres veces mayores que las que se aplican en las proyecciones anteroposteriores (AP) y posteroanteriores (PA). Si hay tejido mamario en la zona sobre la que se aplica el haz, el espesor de la región anatómica objeto de estudio aumentará y será necesario aumentar los valores de exposición (kV y mA) y la intensidad del haz. Por consiguiente, las mamas no deben utilizarse como punto de entrada del haz de rayos X. Por otro lado, la intensidad del haz de salida tiene solamente el 1 % de la intensidad del haz de entrada. Si el haz se orienta desde la superficie posterior en lugar de la anterior, siempre que sea factible y ello no interfiera con la finalidad clínica del procedimiento, disminuirá la probabilidad de que durante las intervenciones de tórax se produzcan lesiones cutáneas en las mamas.