Control biológico

El control biológico supone la producción y suelta en masa de enemigos naturales, como parasitoides y depredadores, para combatir a los insectos causantes de plagas de manera respetuosa con el medio ambiente. La radiación se utiliza para aumentar la aplicabilidad, rentabilidad y seguridad de la cría, el envío y el despliegue de esos enemigos naturales.

El control biológico aumentativo, que consiste en la liberación suplementaria de enemigos naturales de los insectos causantes de plagas, puede complementar la técnica de los insectos estériles (TIE) en los programas de gestión integrada zonal de plagas. Si bien en los programas de la TIE los machos estériles se sueltan fundamentalmente en la etapa adulta, muchos de sus enemigos naturales los atacan en etapas inmaduras. Ello significa que el empleo simultáneo de ambas técnicas de control a menudo puede producir resultados más satisfactorios que se complementan. Además, los subproductos de las instalaciones de cría en masa de insectos pueden utilizarse en procesos de producción relacionados con programas de control biológico aumentativo.

La radiación ionizante, que utiliza rayos gamma y rayos X, puede aligerar una serie de importantes restricciones ligadas al uso de técnicas de control biológico aumentativo, como por ejemplo, reducir el costo de los sistemas de producción de agentes de control biológico, evitar la aparición de insectos causantes de plagas adultos a partir de los huéspedes utilizados para criar en masa parasitoides —parásitos que matan a los insectos huéspedes— y asegurar la esterilidad de organismos concomitantes causantes de plagas durante su expedición. La radiación ionizante también se aplica con buenos resultados para eliminar el riesgo de enviar plagas fértiles de presas u huéspedes, u otras plagas polizones.

Junto con la FAO, el OIEA ayuda a los Estados Miembros a crear y a adoptar tecnologías de base nuclear para optimizar las prácticas mencionadas de gestión del control biológico de plagas de insectos, y respaldar la intensificación de la producción de cultivos y la preservación de los recursos naturales.

Aplicación sobre el terreno de métodos de control biológico y de la TIE

En varios estados de México se ha combinado el uso de parasitoides con la aplicación de la TIE para combatir a las poblaciones de la mosca mexicana de la fruta y la mosca de la fruta de las Indias Occidentales. Ambos agentes se sueltan simultáneamente para atacar con parasitoides a las larvas de la mosca de la fruta que la infestan y con adultos esterilizados a los adultos silvestres, a fin de evitar que la población silvestre se reproduzca. Los parasitoides se crían en masa en larvas de moscas de la fruta que han sido irradiadas para evitar que las larvas no parasitadas se conviertan en moscas adultas.

En Costa Rica se utiliza una aplicación similar para los parasitoides de la mosca brava. Se ha criado con éxito a parasitoides en las larvas esterilizadas de esa mosca, que es su huésped natural. Esa mosca es una plaga que tiene consecuencias económicas para la industria ganadera de Costa Rica y para muchos otros Estados Miembros del OIEA.

Otras contribuciones de las técnicas nucleares e isotópicas

La radiación puede utilizarse para esterilizar agentes de control biológico no autóctonos, reduciendo de ese modo el riesgo de que se introduzcan, como parte de las labores de control biológico convencionales, en nuevos entornos donde podrían llegar a convertirse en plagas de organismos distintos al organismo objetivo. La radiación ionizante también es una herramienta útil para estudiar las interacciones fisiológicas entre el huésped y el parasitoide, como por ejemplo, las respuestas inmunitarias del huésped, al inhibir las reacciones defensivas de los huéspedes naturales o artificiales (no naturales).

Además, la radiación ionizante puede aplicarse a huéspedes o presas semiesterilizados o completamente esterilizados para utilizarlos sobre el terreno a fin de vigilar a las poblaciones enemigas naturales o aumentar la supervivencia inicial y la acumulación de agentes de control biológico naturales o soltados antes del crecimiento estacional de la población de plagas.

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