Ucrania informó hoy al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que el mismo personal ha estado trabajando en la central nuclear de Chornóbil desde que la semana pasada las fuerzas rusas tomaran el control del emplazamiento en que ocurrió el accidente nuclear de 1986, indicó el Director General, Rafael Mariano Grossi, quien además expresó su creciente preocupación por el bienestar constante de los trabajadores y su capacidad para realizar su labor de forma segura y eficaz en todo momento.
En una actualización periódica al OIEA, la Inspección Estatal de Reglamentación Nuclear de Ucrania (SNRIU) dijo que mantenía la comunicación con el emplazamiento de Chornóbil —cuyo personal indicó que estaba desempeñando funciones bajo “supervisión”— y que no se había realizado ninguna operación ahí que implicara el uso de material nuclear desde el 24 de febrero.
La central nuclear de Chornóbil, ubicada en la zona de exclusión, ha estado en proceso de clausura desde el accidente y aún quedan cantidades importantes de material nuclear en diversas instalaciones del emplazamiento en forma de combustible gastado y otros desechos radiactivos.
“Es de suma importancia que el personal que trabaja en la empresa estatal especializada ‘Chornobyl Nuclear Power Plant’ esté en condiciones de realizar su trabajo de forma segura y eficaz, y que quienes han tomado el control garanticen el bienestar del personal”, dijo el Director General, Sr. Grossi, a la Junta de Gobernadores del OIEA en una reunión sobre la situación en Ucrania celebrada hoy en Viena.
El personal de operación de todas las instalaciones nucleares de Ucrania —que también incluyen 15 reactores en funcionamiento en cuatro emplazamientos— debe poder desempeñar sus funciones relacionadas con la seguridad tecnológica y física y tener la capacidad de tomar decisiones sin presiones indebidas, añadió.
El Director General ha subrayado reiteradas veces que debe evitarse cualquier acción militar o de otro tipo que pueda amenazar la seguridad tecnológica o física de las centrales nucleares de Ucrania.
En la actualización de hoy, la SNRIU afirmó que se mantenía en contacto con las centrales nucleares del país, que, según dijo, seguían operando como antes. Los niveles de radiación seguían siendo normales en todos los emplazamientos y no se habían notificado incidentes nucleares o radiológicos, dijo. De los 15 reactores de Ucrania, más de la mitad estaban operando a plena capacidad, mientras que otros estaban siendo sometidos a actividades de mantenimiento programadas o permanecían “en reserva”, añadió.
Los Estados Miembros del OIEA aportan información procedente de estaciones de monitorización radiológica automáticas directamente en el Sistema Internacional de Información sobre Monitorización Radiológica (IRMIS). El 1 de marzo, el OIEA perdió el contacto con las estaciones de este tipo ubicadas en la central nuclear de Zaporiyia, el mayor de los emplazamientos nucleares de Ucrania, que alberga seis de sus 15 reactores, y hoy dejó de recibir el mismo tipo de datos de otra central, la central nuclear de Ucrania meridional, que tiene tres unidades.
Sin embargo, más tarde la SNRIU informó al OIEA que se había restablecido el contacto con las estaciones de monitorización en la central nuclear de Ucrania meridional, y dijo que la pérdida temporal de la transmisión al OIEA se debía a razones técnicas y no estaba relacionada con operaciones militares. Especialistas ucranianos estaban tratando de determinar la causa de la pérdida de la transferencia de datos de la central nuclear de Zaporiyia y de restablecerla, añadió la SNRIU.
El OIEA sigue vigilando de cerca los acontecimientos en Ucrania, prestando especial atención a la seguridad tecnológica y física de los reactores nucleares de potencia de esta. El OIEA sigue en contacto permanente con su contraparte y seguirá proporcionando actualizaciones periódicas sobre la situación en Ucrania.